miércoles, 30 de enero de 2008

Viajecitos que te da la vida

Este pasado fin de semana (25 de Enero) tuve que hacer un viaje a Asturias, mi tierra, como hago de vez en cuando. Esta vez con alegría de ir a ver a mi abuelita que cumplió 81 añitos de nada - bueno, eso creemos, porque como es Venezolana, parece ser que nadie sabe exactamente la edad que tiene... -
Total, que como hago últimamente, cogí un bus directo a Oviedo que apenas hace paradas. Esto tiene la ventaja de que el viaje dura menos tiempo, aunque sea más caro. Además te dan agua y picoteo gratis. (Es lo mínimo, teniendo en cuenta la diferencia de precio)

Lo interesante de la historia, tras 2 horas de viaje escuchando desde Bruce Springsteen, Eagles, Guns and Roses a Diana Krall, Dana Glover, Ayo y Sheryl Crow (todos recomendados), estábamos en algún punto de la carretera entre Mondoñedo y Ribadeo, y al rebasar a un turismo, éste maniobró para girar a la izquierda sin colocarse en el carril central, y aunque el autobús frenó todo lo que pudo, le dimos un toque, no muy fuerte. De todos modos, salió de la carretera terminando la maniobra de manera un tanto brusca.
Os podéis imaginar que yo, en aquel momento, lo que sabía era que el bus llevaba un rato frenando, que había chocado de manera no estrepitosa, y que menos mal que estaba despierta y llevaba el cinturón. Cuando paramos, me levanté y ví el coche al que le habíamos dado el golpe, del cual salían los ocupantes por su propio pie, pero agitados lógicamente. Dentro del autobús parecíamos un enjambre buzbuzeando que habría pasado y que pasaría fuera.
Lo primero que debo decir es que el conductor frenó todo lo que pudo y que a ninguno nos pasó nada, ni siquiera a los del coche.Y aclarar que fue el coche el que se cruzó en la trayectoria del bus, como si éste no existiera.

A partir de ahí los acontecimientos no se precipitan sino que se ralentizan. Poco a poco, fuimos enterándonos de lo había ocurrido, reconstruyendo a partir de lo que nos dijeron los de primera fila y lo que veíamos. Un rato después llegó una ambulancia, y los ocupantes del coche
se fueron en ella, me imagino que con un buen susto y ataque de ansiedad. La Guardia Civil no llegó hasta una hora después del accidente, y tardaron una hora más en dejarnos marchar, eso sí, nos pidieron los datos y preguntaron a cada uno si nos encontrábamos bien. El tiempo se hizo eterno.
Al final ya se nos pasó el susto y empezamos a irritarnos porque nadie nos decía nada. El busero nos ignoraba y no paraba de llamar a sus jefes explicándoles que no pensaba mover el bus hasta que se lo permitiera la Guardia Civil y que él había hecho todo lo que podía. Lo cierto es que el pobre hombre estaba muy preocupado, y sí que nos atendió, en la primera parada tras salir, nos dió a todos un bono para un viaje equivalente gratis por las molestias. Finalmente, todos llegamos a nuestros destinos 2 horas tarde pero bien.

Como conclusión, me he dado cuenta que en estas situaciones todo el mundo reacciona parecido: al principio nos preocupamos de que todo el mundo esté bien, de que no haya nadie herido. Después sentimos curiosidad, más o menos natural o morbosa, según cada uno. Lo siguiente, comprobado que no hay heridos ni nada nuevo, es la continuación de tu vida normal, sin mayor trauma, a menos que no puedas hacer nada, en cuyo caso todo el mundo se va frustrando e irritando, en nuestro caso liberamos irritación hablando de la queja que le íbamos a poner a la compañía (antes de saber que nos iban a dar el billete gratis, claro). La cosa no pasó a mayores.
Yo llegué a Oviedo, conté esto por teléfono a mi gente y en directo tropocientas veces, y hoy exorcizo mis demonios.
Creo que tengo mucha suerte pues casi no he tenido accidentes en mi vida, y no han sido graves.
Pero estas cosas siempre desconciertan, y hacen que recordemos el valor de lo que tenemos y lo frágil que es todo ello.

Un besito a todos los que os hayáis molestado en leer este rollete de desahogo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Vaya! Me alegro de que nadie saliera mal parado =)

patxon dijo...

Pues si, menos mal que sigues de una pieza, de lo que fue a lo que pudo ser... mejor no pensarlo ¿verdad?

Jo, como mola, al llegar al final del post das besitos, yo me los voy a leer todos xD bueno, venga, no solo por el beso, tambien por que me mola lo que nos cuentas :)

kurisu neko dijo...

Gracias a todos (es decir a los dos xD) por apoyarme y comentar.

Más besitos, por el apoyo. ^.^U